La situación de los profesionales de la abogacía ha venido deteriorándose en los últimos tiempos, tanto en su imagen social como en su situación económica. Gran parte del problema se deriva de la gestión de la Mutualidad de la Abogacía, ahora denominada sólo Mutualidad, y la perversión del sistema de previsión social alternativo a la Seguridad Social al que se acogieron muchos profesionales.
Además de los problemas derivados del turno de oficio ( https://anacaminoabogado.com/huelga-del-turno-de-oficio-de-abogados-y-procuradores/ ), las reivindicaciones se dirigen a solventar la situación de desprotección de los profesionales que están acogidos a la cobertura de la Mutualidad en cuanto a su previsión social, fundamentalmente de jubilación. La reivindicación fundamental es la aprobación de un decreto que habilite una pasarela al RETA de los profesionales afectados.
Este sistema, obligatorio hasta el año 1996, incentivado y publicitado desde los propios colegios profesionales, ha dejado de ser un sistema eficaz para la protección de los mutualistas, habiendo sido declarado «producto de alto riesgo» por un informe especializado al que tuvieron acceso los Colegios de Abogados, pero que no llegó a los mutualistas, que continuaron en el mismo sistema, cada vez más desprotegidos, además de no poder rescatar los fondos depositados ni poder contabilizar los tiempos cotizados en la Mutualidad para generar una prestación de jubilación en la Seguridad Social.
Es un tema difícil de explicar a la ciudadanía, y difícil de entender que los profesionales jurídicos no nos hubiésemos percatado de la situación con anterioridad, pero … en casa del herrero, cuchillo de palo
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