COMPRA DE VIVIENDA USADA
La compra de la vivienda es una de las mayores inversiones de las familias españolas, por lo que contar con el asesoramiento adecuado supone evitar problemas y perjuicios económicos en un futuro.
La parte compradora suele ser la que más “riesgos” asume, pero también los vendedores se pueden ver perjudicados por cuestiones derivadas de la compraventa.
CUESTIÓN: Determinar la situación jurídica real del inmueble.
1.- Vendedor:
El título de propiedad del inmueble debe ser correcto y que pueda surtir todos los efectos legales necesarios.
No es imprescindible ni obligatorio, pero sí es importante que el inmueble está inscrito en el Registro de la propiedad correspondiente, puesto que sin este requisito los bancos no conceden préstamos hipotecarios, por lo que el número de compradores potenciales se reduce mucho.
Para que la protección que ofrece el Registro sea completa, la inscripción debe tener una antigüedad mínima de 2 años.
2.- Comprador.
Tanto el vendedor como la agencia inmobiliaria que pueda intervenir en la compraventa, están obligados afacilitar todos los datos, tanto físicos como jurídicos, del bien inmueble que se va a comprar.
Con esta información, es muy recomendable que el interesado en la compra compruebe la inscripción en el Registro de la propiedad, y verifique que las personas que actúan como vendedores tienen un título válidoque les reconoce el derecho de propiedad que pretenden vender. También es recomendable solicitar informe de la Comunidad de propietarios sobre la existencia de derramas o pagos extraordinarios ya acordados; esta información sólo podrá pedirla el vendedor, que es el propietario actual, al administrador de su comunidad, que no debería facilitársela a nadie ajeno a dicha comunidad. Dependiendo de esta información, se podrá negociar el precio, ya que el legalmente obligado al pago de esas derramas es la persona que era propietaria en el momento de tomarse el acuerdo.
Si se pretende comprar un local comercial, es recomendable comprobar en el Ayuntamiento las limitaciones urbanísticas que le afectan, así como las normas de la Comunidad de propietarios que puedan suponer una traba al desarrollo de alguna actividad económica.
Si se pretende comprar una parcela, también habrá de comprobarse la información urbanística que la afecta, para saber si está permitido el uso que pretendemos darle.
En todo caso, que un abogado revise toda la información y la documentación supone una garantía para conocer exactamente en qué situación se encuentra el inmueble y los problemas y consecuencias previsibles que se puedan derivar en el futuro.